Auditorio y Conservatorio de Música y Danza en Ferreries. Menorca.
Concurso. Primer premio
Se pretende hacer un edificio sobre un parque, y rodeado por él, nunca una barrera para él. Asumiendo su condición de palafito, el proyecto se concibe como dos elementos ciegos flotando en el aire que configuran un vacío entre ellos (auditorio al aire libre).
Una mesa, una «taula», que por la ligereza de su apoyo no se apropie del espacio circundante, sino que lo deje fluir. Esta condición de transparencia no sólo se ve favorecida por la naturaleza de los apoyos, la propia fisonomía del auditorio exterior, convierten al edificio en un gran polifemo. Un ser monocular a través de cuyo ojo ciudad y parque se miran mutuamente.
(fotografía Carlos Silvestre)